Marlaska ordenó un dispositivo policial sin contemplar las «consecuencias» de las amenazas a C’s
Fueron necesarios hasta 9 vehículos policiales -de la UPR, UIP y Policía Municipal- para controlar la situación y defender a los miembros de Ciudadanos de la turba.
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Los miembros de Ciudadanos tuvieron que ser rescatados por nueve coches de la Policía Nacional y Municipal
La orden llegó tarde y mal. Los policías que escoltaron a los miembros de Ciudadanos agredidos en la manifestación del Orgullo LGTBI en Madrid, el pasado sábado, se vieron obligados a improvisar. El dispositivo que ordenó Marlaska no contemplaba las «consecuencias» previsibles de las amenazas recibidas por la formación naranja tras el veto impuesto días antes a los de Rivera por parte del Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid (COGAM), una de las entidades convocantes de esta polémica edición.
Fuentes policiales confirman a OKDIARIO que el Ministerio del Interior -cartera que Marlaska dirige en funciones- no incluyó en la orden operativa los riesgos específicos de la presencia de la comitiva de Ciudadanos en el evento por lo que, cuando se produjeron las agresiones contra ellos, los mandos tuvieron que reaccionar sobre la marcha.
Fueron necesarios hasta 9 vehículos policiales en la escena para controlar la situación, pero no todos ellos se encontraban lo suficientemente próximos como para garantizar una intervención inmediata para defender a los miembros de Ciudadanos de la turba. Hasta tal punto creció la tensión que algunos de los relevos policiales inicialmente planificados no se produjeron y muchos de los efectivos que debían abandonar posiciones, sobre las 22:00 horas, permanecieron como refuerzo a sus compañeros del turno siguiente.
Por ello, minutos antes y en vista de cómo se desarrollaban los acontecimientos y crecía la violencia sin que las unidades operativas reaccionasen -en espera de las instrucciones de sus superiores- seis miembros de paisano de la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional, de los 20 desplegados como escolta en los laterales del recorrido, no dudaron en ponerse al frente de la comitiva de los políticos de Ciudadanos y parapetarles frente a una lluvia de objetos, pintura y líquidos cuyos impactos recibieron directamente. Así lo revela el digital policial H50 en su página web.
Una actuación que comprometió gravemente la integridad física y profesional de todos ellos ya que -tal y como subrayan expertos en orden público y seguridad a OKDIARIO- los agentes de información son policías de los que «nunca debe desvelarse su condición ni resultar identificables».
Falta de efectivos
Si bien fuentes policiales aseguran a este diario que existía una orden de servicio específicamente dirigida a la cobertura del acto central de la semana del Orgullo LGTBI en Madrid, denuncian que los grupos operativos de orden público asignados a la misma eran insuficientes: tan sólo 2 de la Unidad de Intervención Policial (UIP).
OKDIARIO ha podido saber que no se cancelaron días libres a ningún agente y aquellos asignados en unidades desplegadas en otros puntos de la ciudad -Chamartín, CIES, plaza de Colón, …- ocuparon sus posiciones habituales. Parte de dichos indicativos fueron finalmente retirados de dichas ubicaciones y enviados como refuerzos hasta el lugar donde este sábado se encontraban bloqueados los miembros de Ciudadanos, durante el recorrido de la manifestación del Orgullo.
Las mismas fuentes lamentan que su tiempo de llegada se viese limitado al tener que acceder con los vehículos policiales hasta el ‘punto caliente’ a través de calles saturadas de gente. Una «tardanza» que denunciaba tanto la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas como su compañera Begoña Villacís, vicealcaldesa del Ayuntamiento de Madrid.
Dimisión
Los policías criticaron ayer, a través de un comunicado emitido por la asociación profesional, ‘Policía para el siglo XXI’, el hecho de haber tenido que evacuar de la manifestación a la comitiva de Ciudadanos en lugar de proceder a la retirada o detención de quienes les insultaban y agredían.
Quienes forman parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desaprueban «la decisión de sacar a Ciudadanos de la marcha por razones de seguridad» en lugar de «desalojar a los violentos» porque «la seguridad la comprometen los violentos, no sus víctimas».
Además, los policías consideran inadmisible que tras los «gravísimos sucesos ocurridos» el sábado -durante el transcurso de la manifestación del Orgulloo 2019 en Madrid- Marlaska continúe al frente de Interior.
A los policías no les ha gustado que quien «debiera ser la cabeza visible de la lucha contra toda violencia y no de su justificación» se pronunciase horas antes de los altercados en unos términos que «abochornan a todos los que dedicamos la vida a luchar contra la intolerancia y la discriminación».